
En las puertas del hospital central, familiares de Milagros Portillo, de 24 años, se manifestaron este lunes para pedir “explicaciones” y justicia por la muerte de la joven que se internó por una cesárea programada el domingo 14 de mayo y falleció dos días después.
Celia Caballero, tía de la joven, dialogó con el móvil de CIUDAD TV y brindó detalles de lo ocurrido con Milagros, desde su internación hasta su deceso el martes 16. Comentó que “pasó todo el domingo, le pusieron goteo y pastillas en el útero, le rompieron la bolsa”. Y que el lunes, cerca de las 11, le hicieron hacer gimnasia. “Ella se comunicaba con el esposo y con mi hermana, su mamá. Y le decía lo que le hacían y que no daba más. ‘No puedo más’, le decía. Mi hermana le decía que les hable y ella que les hablaba , pero que le decían que había esperar nada más. Cerca de las 2 de la tarde del lunes vengo a donde está mi hermana y le digo que iba a subir para preguntar por Milagros. Ella había pasado toda la noche con dolores por trabajo de parto y el lunes seguía con lo mismo. Como no teníamos novedades yo subo y mi hermana y el esposo seguían esperando para que presencie el parto, que era lo que estaba estimado”, prosiguió la mujer.
“Nunca lo llamaron y cuando subo me preguntan quien era y les digo que soy la tía y que necesitábamos saber. Me dijeron que estaba en parto ligero y que estaba bien así que bajé y le dije a mi hermana y me fui. Yo vivo en Fontana”, contó.
Llegó a su casa cerca de las 15 y recibió el llamado de su hermana a las 15,20. “Me dijo que me necesitaba ahí porque Milagros estaba en terapia y estaba mal. Y me cortó el teléfono”.
“Llegué cerca de las 16 y me dijo que no le habían dicho nada. Subí a Terapia y me puse a golpear puerta por puerta hasta que me atiende el terapista y me da el informe del estado en el que llegó a Terapia. Ella llegó desangrada, tenía un desgarro uterino, le sacaron el útero, le sacaron un ovario y se desangró. No tenía sangre para llegar al corazón y a otros órganos. Me dijo que era mucha la posibilidad de fallecer y que llamáramos a la familia, eso fue el lunes a las 16,30 más o menos”, indicó.
“Ella entró por un parto programado”, exclamó la mujer y advirtió que se le abrió una herida de una cesárea de hace 8 años. “Nadie salió a dar la cara, no tenemos respuestas. Queremos que los responsables paguen por lo que hicieron”, sostuvo.
Milagros Portillo falleció el martes, cerca de las 8. “Me llamaron a las 8,27 diciéndome que había fallecido.
Por otro lado, la niña que nació el lunes, según el relato de su tía, “nació sin latidos, tragando sangre, estuvo intubada y al esposo le dijeron que estaba grave. La dejaron ver a eso de las 15 un ratito y a la esposa nunca más la vio. No le permitieron verla porque estaba en cirugía”.
“El martes, cuando falleció, en mi locura les pedí que hiciéramos algo, no podíamos sacarla sin que nadie nos de una explicación. Así que me fui a hacer la denuncia penal al Destacamento del Hospital así que la llevaron para hacer la autopsia y tampoco sabemos nada sobre la autopsia”, relató la mujer.
En medio de la manifestación de este lunes, Caballero insistió: “Estamos acá esperando a que alguien nos de una respuesta. Que salga alguien a darnos explicaciones por tantas vidas que están robando. Ella tenía 24 años y dos hijos, uno de 8 y una de 3. Y esa bebé que todavía está en Neo y que yo cada tres horas subo a darle su leche porque hou su mamá ya no lo puede hacer”, concluyó.