
“El objetivo de la empresa era sobrestockearse de mercadería a valor de dólar oficial”, precisó la Aduana en un comunicado difundido hoy.
El organismo se presentó en el expediente solicitando al Juzgado Contencioso Administrativo Federal 8 que se revoque la cautelar a favor de la empresa (expediente 18.799/2021) “porque no se había verificado un requisito esencial: el peligro en la demora para otorgar el beneficio judicial”, indicó.
La cautelar fue otorgada para 39 SIMIs (Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones) y era por US$ 128 millones, equivalentes a las importaciones que la empresa necesita en cuatro años a los valores actuales, lo cual para la DGA “demuestra el uso abusivo de cautelares” por parte importador.
La empresa desistió de la cautelar y deberá empezar a importar por los procedimientos normales, debiendo obtener la SIMI y las autorizaciones del Banco Central para poder pagar la mercadería.
La Aduana ya consintió el desistimiento de la cautelar, con lo cual la medida judicial ya quedó sin efecto.