
Hubo un buen movimiento en los establecimientos más tradicionales como Keops, Khalama y Molino Rojo, entre otros.
El viernes pasado se implementó una ”prueba piloto” de las nuevas flexibilizaciones y los boliches tuvieron la posibilidad de trabajar hasta las cuatro de la mañana, al tiempo que en el centro carlospacense regresaron los tarjeteros.
Rony es encargado del boliche Khalama y contó a EL DIARIO: ”Se estuvo moviendo muy bien, ha venido bastante gente y mucho adolescente. Han vuelto también nuestros chicos a las calles, con barbijo y las medidas sanitarias, para trabajar como tarjeteros”.
”Se está pidiendo la aplicación Mi Argentina al cliente cuando ingresa al boliche. La gente está respetando el horario de ingreso y hemos tenido un buen movimiento”, destacó.