
Conmovido por lo sucedido, Navarro agradeció, ”a nuestro gobernador, a nuestra ministra de Salud, subsecretarios y a los que colaboraron desde el lado de Formosa, ya salieron las fotos por todos lados y es ahí el motivo de mi publicación. Mostrarles a las personas que estuvieron, esos profesionales que no salieron en las fotos”.
El trabajador recordó que ante un parto inminente de un parto prematuro de 32 semanas, ”nos pusimos en marcha con todos los preparativos e insumos que tenemos disponibles. Recuerden que estamos en un Hospital rural, complejidad 3 en El Sauzalito”.
Al nacer el pequeño, vieron la necesidad, ”de darle calor, oxígeno y estímulos para que no decaiga. Y ahí estaban ellas, las enfermeras Laura y Patry, haciendo lo imposible posible…Unas genias, al pie del cañón!”
En esos momentos, hubo un corte de la luz, ”se nos fue la fuente de calor”, señaló. Y reveló la enorme colaboración de la Dra. Rosan Medina, médica de Neonatología del hospital del Bicentenario de Castelli. ”La desperté a las 5 AM para que nos diera una mano y ahí estuvo presente a través de videollamada. Ya para esa hora diluviaba en casi todo el Chaco y era imposible derivar en ambulancia, a pesar de la voluntad de los choferes de querer hacer el esfuerzo para salvar este pequeñito”.
A las 9 de la mañana. ”volvió la luz pero ya no teníamos señal de celulares, y seguía lloviendo. Y llegó Cecilia, jefa de enfermeras y una de las responsables de la gran mejora de nuestro pequeñín que se nos venía abajo”.
Se organizó el operativo de traslado y se sumó, ”nuestro odontólogo que quizás no tenía nada que ver con un bebé porque no tiene dientes …pero ahí estaba para ser el apoyo, nuestro grupo de choque”.
Con la pericia del chofer de la ambulancia, de apellido Salto, comenzaron el primer tramo de 26 kilómetros de ruta de tierra y barro. El bebé era asistido con oxígeno, suero y el ánimo del grupo; para luego arribar a la vera del río Bermejo y cruzar el mismo en una canoa.
”Y llegamos al otro lado. Llegamos a la ambulancia de Formosa, nuestra salvadora para el traslado. Y a volver… con la alegría de haber cumplido nuestra misión”, cerró Leonardo David Navarro. Quién también agradeció a quien condujo la canoa hacia la costa formoseña y los trajo de vuelta.