
Habló de una medida de fuerza definida en la órbita de la Conadu Histórica la semana pasada, “una jornada de protesta en el sentido de que todavía no fue convocada la mesa de negociación salarial, habiéndose vencido el 1° de marzo nuestra paritaria. Estamos en un momento de alerta y con un cálculo aproximado de pérdida salarial de 20%. Frente a eso no hay ninguna propuesta aún, ni siquiera de convocatoria. Así que decidimos una jornada de protesta y un paro de 48 horas a definir por el plenario de secretarios generales que vamos a realizar mañana 26 de marzo”.
“Estamos diciendo que sostuvimos todo el año 2020 y el inicio del 2021, dado que la mayoría de las universidades han acordado que se inician las clases nuevamente virtuales, a pesar de que algunas actividades se realizan de manera presencial; pero los docentes universitarios estuvimos dando clases desde nuestras casas. Tuvimos que poner dinero, gastos para mejorar nuestra conexión, en algunos casos para poder sostener las clases con datos y además debieron adecuar sus equipos informáticos”, advirtió y recalcó que “eso es un gasto que no teníamos en la presencialidad, sin embargo, no hay ningún reconocimiento por parte del Gobierno Nacional ni por parte de las universidades”.
Aseguró que solo cinco universidades nacionales reconocieron “de alguna manera” este gasto. “En 2021 seguimos con el trabajo virtual y no hay un reconocimiento efectivo; no está contemplado en nuestro convenio colectivo de trabajo el teletrabajo”.
“Perdimos más que los empleados estatales. (…) Estamos reclamando recuperar lo perdido y no perder este año con la inflación por eso solicitamos la cláusula gatillo que el gobierno nacional no cumplió”, apuntó.
El aumento del presupuesto educativo y que el cargo testigo reciba un salario no menor a la canasta básica salarial, son otros de los puntos de conflicto.