La pérdida del bosque nativo y la degradación del suelo por le fuego, hace que la tierra no pueda absorber correctamente el milimetraje caído y se formen verdaderos ríos que corren hacia las zonas más bajas.
Tras las últimas precipitaciones que cayeron en Carlos Paz, el agua comenzó a bajar con fuerza desde las laderas de las sierras devastadas por los incendios hacia el río San Antonio.
La pérdida del bosque nativo y la degradación del suelo por le fuego, hace que la tierra no pueda absorber correctamente el milimetraje caído y se formen verdaderos ríos que corren hacia las zonas más bajas.