
En aquel entonces, no se contemplaron las variaciones que presentaría el caudal del lago San Roque y cada creciente, fue haciendo un trabajo de desgaste sobre la estructura, al punto de provocar el derrumbe de las veredas y la aparición de grietas sobre la calzada.
A partir de la primera gestión de Esteban Avilés, se dispuso el cierre vehicular del paseo costero que se extiende desde el Carlos Paz Rugby Club hasta la zona de la Bahía del Gitano y comenzó a trabajarse en la reparación.
Luego que se adjudicaran los trabajos a la empresa CAVICOR en 2018, la misma entró en quiebra y debió convocarse nuevamente a un proceso licitatorio que fue ganado por la empresa ARICO, que comenzó con las obras hace algunas semanas atrás.
Las tareas se llevan adelante entre las calles Artigas y la plazoleta Raúl Alfonsín y contempla la construcción de defensas a lo largo de gran parte de la costanera norte como se hizo en la localidad cordobesa de Miramar, que cuenta con una protección de rocas dispuestas sobre una membrana geotextil que la resguarda de la acción erosiva del oleaje.