En declaraciones a radio Libertad, Sardi comentó que el remisero se presentó en la Dirección de Tránsito para decir que se mostraba arrepentido por haber atropellado a la inspectora. “Fue tarde, fue después de que una trabajadora tuvo que ser internada, con golpes en la cabeza y en los brazos. Tiene que ser penado”, consideró Sardi.
Destacó que la mujer agredida ya volvió a su casa y está fuera de riesgo. “Si uno mira el video, aceleró el auto como para pasarla por encima”, describió. “La gente tiene problemas en su casa y se los agarra con los inspectores”, añadió, al intentar buscarle una explicación a semejante actitud.
Por otra parte, resaltó que este tipo de acciones no sólo ponen en riesgo la integridad física de los trabajadores de la seguridad vial, sino también del resto de la comunidad.
Este caso no fue el primero que se da en Resistencia de agresiones contra inspectores de tránsito. Sardi aseguró que los anteriores directamente no tuvieron sanción por parte de la Justicia. “El avance es realmente muy poco. No entendemos cuál es el parámetro para penar este tipo de actitudes”, cuestionó.
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