
El titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 10, Julián Ercolini, dispuso la intervención judicial de la empresa que administra el hotel Alto Calafate. Es en el marco de la causa en la que la expresidenta Cristina Kirchner, y sus hijos Máximo y Florencia Kirchner, se encuentran procesados por presunto lavado de activos. También el empresario Lázaro Báez y Osvaldo Sanfelice, según informó el Centro de Información Judicial de la Corte Suprema.
Según la hipótesis de la investigación, los hechos tendrían como antecedente la defraudación al Estado nacional cometida mediante la adjudicación irregular de obra pública vial en la provincia de Santa Cruz a empresas de Báez y otras personas. Así, los fondos obtenidos de ese delito se habrían canalizado, en parte, mediante otras personas jurídicas intervinientes en una etapa intermedia –como Austral Construcciones SA, Loscalzo y del Curto SRL, Kank y Costilla SA, entre otras- para transferir mediante contrataciones simuladas el dinero a Valle Mitre SA. Esta última, por su parte, los habría dirigido a Hotesur SA y a los patrimonios personales de los expresidentes Kirchner y Fernández y sus hijos con motivo de la explotación de los hoteles de su propiedad.