
Fuentes consultadas por Periodismo365 confirmaron que la salvaje agresión fue perpetrada por cuatro motochorros frente a la Plaza Esperanto del Barrio Oro Blanco.
Mientras dos delincuentes golpeaban y robaban al menor impunemente, a cara descubierta y a plena luz del día, los otros dos “controlaban” la zona a modo de “campana”.
Las mismas fuentes consignaron que el adolescente regresaba de clases en el horario habitual de salida, caminando por la vereda de la mencionada Plaza, por calle 18 hacia el sur, y no venía utilizando su celular.
Al llegar a la esquina de calle 18 y Santiago del Estero, el jovencito vio a dos sujetos que se cruzaron en una motocicleta y quedaron observándolo. Pero al atravesar la calle para ir a su casa, de golpe aparecieron otros dos individuos también a bordo de una moto.
De inmediato uno se bajó, empujó al estudiante quien cayó al suelo, y allí comenzaron a revolcarlo y golpearlo ferozmente, propinando patadas y trompadas en la cabeza y en todo el cuerpo, a la vez que los dos delincuentes le revisaban toda la ropa para robarle el teléfono celular, billetera, reloj, y todo lo que llevaba encima.
Ante los gritos desesperados de auxilio del indefenso estudiante, los malvivientes huyeron con todo lo robado, dejándolo tirado en el medio de la calle, no sin antes destrozar toda la mochila, buscando aparentemente también una notebook.
Los dos violentos ladrones escaparon hacia la zona de la UNCAus; mientras los otros dos lo hacían en dirección opuesta, hacia el Barrio 1º de Mayo.
Intervinieron efectivos de Policía Rural que casualmente estaban circulando a varias cuadras de este nuevo y grave incidente de inseguridad, cuando fueron alertados del hecho. El joven fue revisado por un médico particular y presenta lesiones en rostro, cabeza y varias partes del cuerpo; pero, afortunadamente, no revestirían gravedad.