
Los flebótomos son insectos voladores de menos de 5 mm de tamaño, de color marrón claro a oscuro y con el cuerpo cubierto de pilosidades con el par de alas levantadas en todo momento como formando una letra “V”.
Hay un gran número de especies de insectos pequeños que pican y tienen esas características, por lo que es difícil que la gente reconozca a este insecto con un nombre común, y a menudo es confundido pudiendo llamarlo algunas personas “polvorín”, “jején”, “carachai”, “torito”, “plumilla” y otros similares, aunque la interpretación es distinta para cada persona.
De las 37 especies registradas hasta el momento en Argentina, 18 se describieron en la Provincia de Chaco.
El Instituto de Medicina Regional de la UNNE es una institución de referencia en el estudio de flebótomos, integrante de la Red de Investigación de la Leishmaniasis en Argentina (REDILA), y en el marco de las colecciones realizadas en la última década en la región fue posible avanzar en un trabajo científico que posibilitó la identificación y registro de una nueva especie.
Se trata de Evandromyia chacuensis sp. nov., tomado de la palabra “chacú” que solía nombrar un territorio de caza o la técnica de caza en el idioma de los nativos de donde proviene el nombre hispano de la región “Chaco”.
Los ejemplares para la identificación de la nueva especie fueron capturados para en tres municipios de la provincia de Chaco: Misión Nueva Pompeya, ubicada en la biorregión seca, al norte provincial y en Colonia Benítez y Resistencia de la biorregión húmeda, al sur.
La especie descripta por el Dr. Enrique Szelag y Mgt. Juan Rosa, investigadores del Área “Entomología” del Instituto de Medicina Regional de la UNNE, se halla en el marco de investigaciones realizadas con la participación del Instituto Nacional de Medicina Tropical (INMET) de Puerto Iguazú (Misiones), CONICET, el Departamento de Epidemiología de la Facultad de Saúde Pública (Universidade de São Paulo) y el Centro de Referencia Nacional e Internacional para Flebotomíneos “Instituto René Rachou” (Belo Horizonte, Brasil).
La identificación de la nueva especie, por su relevancia, fue publicada en el Journal of Medical Entomology, de la Universidad de Oxford, publicación de referencia internacional.
Nueva clasificación
“Este aporte a la ciencia, además, contribuyó a proponer modificaciones en la clasificación de especies”, según explicaron Szelag y Rosa.
Los investigadores consideraron que los caracteres morfológicos de la nueva especie “Evandromyia chacuensis sp. nov.” permitían su inclusión en la serie Cortelezzii del género Evandromyia (Barretomyia). Esta serie, Cortelezzii, se conforma de un grupo de cuatro especies crípticas: Ev. corumbaensis, Ev. cortelezzii, Ev. sallesi y Ev. spelunca.
Sin embargo, basado en la descripción de la nueva especie, se estimó necesario separar claramente la serie Cortelezzii en dos grupos de especies, por un lado, el formado porEv. cortelezzii y Ev. sallesi, que propusieron seguir llamando “Complejo Cortelezzii”, y el otro grupo, representado por Ev. corumbaensis, Ev. spelunca y Ev. chacuensis sp. nov., que propusieron nombrar como “Complejo Corumbaensis”.
“Es importante observar que en las hembras de la serie Cortelezzii, recolectados en el área seca de la provincia de Chaco, se han encontrado con ADN de Leishmania braziliensis, el parásito causal de la leishmaniasis tegumentaria, lo que subraya la importancia de este grupo de especies en la región y la necesidad de corregir la identificación” comentó el Dr. Szelag.
Sin embargo, las publicaciones actualizadas de distribución de flebótomos en Argentina describen a Ev. cortelezzii y Ev. sallesi hasta la provincia de Córdoba, lo que sugiere que el complejo Cortelezzii tiene una termotolerancia más amplia permitiendo la colonización de las provincias del sur, mientras que el nuevo complejo propuesto, “Corumbaensis”, está restringido a los ambientes más cálidos en el norte del país.
Los investigadores del Instituto de Medicina Regional de la UNNE mencionaron la relevancia del trabajo y en especial la interacción con instituciones de referencia nacional e internacional, como las mencionadas anteriormente, y de su aplicación mediante trabajos multidisciplinarios con el sistema de salud, ya que estos resultados no sólo son de importancia para la comunidad científica sino para la salud pública también, porque se está hablando de la presencia de probables transmisores de una enfermedad parasitaria, como podría ser la Leishmaniasis.