
Ziesenis, sostuvo que “es un año favorable para el algodón” y surge “un panorama a futuro con un aumento de siembra en las dos provincias”. Puso como ejemplo a Formosa que, de cosecharse este año unas 8.000 hectáreas, “prevemos que el próximo año se extenderá a unas 12.000”.
El dirigente agrario indicó que, “el algodón venia de varios años de falta de rentabilidad, disminuyó mucho en la región, y los precios bajos y el factor climático hacían que haya problemas para la siembra y cosecha”.
En ese sentido explicó que este año en la región, lo que es Chaco y Formosa, “el picudo aflojó, no tuvimos un ataque tan duro como antes, esto tiene que ver con el comportamiento de los productores, en cumplir con la destrucción de rastrojo y la siembra uniforme”.
Detalló, además, que “en las dos provincias en los meses de febrero, marzo y abril no llovió tanto y pudimos cosechar bien. En Formosa podemos decir que llegamos a las 8.000 hectáreas con buenos rendimientos, buena recolección, y con precios que, si bien no son lo que esperamos, tuvo el buen rendimiento por hectárea de entre 1.800 y 2.000 kilos de algodón. Con un costo que anduvo en los $10.000 por hectárea, en comparación a otras cosechas como el grano, maíz y sorgo, dan un año favorable para el algodón”.
Ziesenis remarcó que en el Chaco “se repite este panorama y con mejores rindes. Anduvo muy bien en rendimientos y esto nos presenta un panorama a futuro con un aumento de siembra en las dos provincias”.
Para finalizar agregó que se espera para el próximo año, a pesar de que hay muchos productores que se están volcando al maíz y a la soja, “que el algodón aumente su área de siembra”.
Aunque aclaró que “esto nos presenta varios planteos que lo llevaremos a la Mesa Agrícola, que será la logística y lo que tiene que ver con el funcionamiento de las desmotadoras y donde se ubicará el algodón, ya que prevemos que la cosecha para el próximo año, en Formosa, sea de unas 12.000 hectáreas”.