
Será una juntada de amigos y familiares, donde con guitarra, vino y algunos videos, se lo homenajeará y evocará, para que su inolvidable figura deje ser una fotografía para perpetuar la imagen de un insobornable luchador por los derechos de todos.
Poco meses después de su fallecimiento, el 20 de julio del año pasado a los 67 años, la Legislatura chaqueña, en un acto cargado de emociones, recuerdos y honores, en diciembre pasado distinguió con el Premio Derechos Humanos “Amanda Mayor de Piérola” edición 2016 (ley 6157) a Adolfo ‘Fito’ Molodezky (post mortem), en un claro reconocimiento a su entrega como docente y luchador de las causas sociales.
En ese acto muy valorado, su hijo Marcelo lo recordó. “Alguien dijo alguna vez que mi viejo era la síntesis entre la utopía y la realidad” marcó, y describió: “Él no fue militante de café. La militancia era en la calle, poniendo el lomo y las manos en cada ocasión. No se guardó nada, vivió como pensó. Fue un tipo integro”.
‘Fito’ será siempre un ejemplo de dirigente del Movimiento Territorial Liberación (MTL) y docente de Educación Técnica y de formación profesional.