
En conferencia de prensa, el Lic. Mirón, acompañado por la fiscal Gisela Oñuk; el jefe de Investigaciones, comisario Gustavo Vázques, y el jefe regional de Policía, Gustavo Vivas, explicaron los pormenores del homicidio de Luis Barco.
El perito judicial expresó que según el trabajo de campo llevado adelante en el lugar, “desde un primer momento y por las evidencias que existían en el sitio era realmente el área donde se dio el hecho”.
“En un punto encontramos restos de vidrios y consideramos que ese vidrio podría ser parte de los elementos que se utilizaron para ultimar a Barco; y entre los allanamientos que se llevaron adelante en la noche del viernes se logró localizar la motocicleta. En el vehículo además de sangre de la persona fallecida se encontraron restos de vidrios de botella. Esto vino a coincidir con la mecánica de como sucedió el hecho en torno a nuestro pensamiento”, señaló el especialista.
Cómo habría sido el crimen
Asimismo, Mirón explicó que, “nosotros manejábamos en un primer momento que el arma que se había utilizado para terminar con la vida de Barco era una botella. Inicialmente en la mecánica intervino el uso de una botella, se produce un golpe, con los dos vehículos en movimiento y con los pasajeros arriba de las motos. Los conductores caen de sus vehículos y ahí aparece un arma blanca que es lo que produce finalmente la muerte”.
“Hay otra lesión a nivel del cuello que creemos por las características que tiene – esto lo va a informar debidamente el médico forense – es producida por los restos de vidrios de la botella, más precisamente por el pico de la misma. También se encontraron otras lesiones. Lo que produce la muerte realmente, y esto surge de la autopsia, es un arma blanca que produjo una hemorragia interna y causó el deceso. Además, el cuerpo presenta golpes en el rostro y pérdida de piezas dentarias por la violencia de los golpes. Luis Barcos transitaba junto con los dos detenidos, el occiso en una motocicleta y los dos detenidos en una moto a la par al momento del hecho”, agregó.
Los detenidos
El principal sospechoso del crimen es un tal ‘Beco’ Barrios, de 28 años de edad, quien además posee un frondoso prontuario; y estaba alojado en Alcaidía y hace unos meses recuperó la libertad.
Antes, los investigadores requisaron el domicilio de un tal ‘Grasita’ M.; el que – al momento del procedimiento – llamativamente tenía puestas zapatillas similares a las de la víctima. Calazado que fue reconocido por el padre de Barcos.. Y posteriormente se detuvo, en la casa de su abuela, a C. G.V. Arg., alias ‘Kinka’, de 18 años edad. Individuo que, tras ser conducido y alojado en la División Investigaciones, señaló a ‘Beco’ Barrios como autor de la puñalada que terminó con la vida de Barco.